BRUMA FACIAL
La bruma facial es un cosmético en spray que se utiliza para recuperar
la vitalidad del rostro y mantenerlo hidratado, protegido y fresco.
Se puede usar de diferentes formas: como preparador de la piel antes de la crema o el sérum o como fijador de maquillaje
para extender su duración. En definitiva, su finalidad es refrescar la piel y reforzar la hidratación en cualquier momento
del día, por ejemplo, cuando sentimos la piel cansada, seca o apagada. Su práctico formato es ideal para llevar a todas
partes y tenerlo siempre a mano.
¿Cómo se usa?
Rociá a unos pocos centímetros de la cara con los ojos cerrados.
Un dato importante a tener en cuenta es que la bruma no sustituye al sérum, ni a la crema,
ni al tónico, sólo los complementa.
BRUMA CORPORAL
La bruma corporal es un spray ligero, con activos hidratantes y una
fragancia muy sutil y delicada.
¿Cómo se usa?
Se aplica directamente sobre la piel de todo el cuerpo, preferiblemente después de la ducha. Tiene la textura ideal para esos
días en los que no tenés tiempo de esperar que la crema corporal se absorba, pero querés mantener tu rutina de hidratación.